Las cerámicas esmaltadas en blanco recuperan su color dejándolas en remojo en agua tibia con bicarbonato (1 cucharada por litro). El agua oxigenada también es un potente blanqueador.
Las cerámicas esmaltadas en blanco recuperan su color dejándolas en remojo en agua tibia con bicarbonato (1 cucharada por litro). El agua oxigenada también es un potente blanqueador.