Hoy en día, además de realizar las tareas del hogar muchas mujeres deben salir a trabajar para aportar unos pesitos más a la economía familiar. Otras trabajan desde sus casa y, precisamente, a todas ellas están dedicadas estas líneas…, porque sabemos lo difícil que resulta en algunos momentos llevar adelante estas dos tareas ¡y en el mismo lugar!
La calve del éxito se basa en dos conceptos fundamentas: espacio y tiempo. El primero, por supuesto, se refiere al espacio físico. Es importante contar con un ambiente o, al menos, un rincón con un escritorio donde poder realizar su trabajo y ubicar sus elementos, sus libros, carpetas y papeles sin necesidad de tener que estar levantando todo cada vez que tiene que servir la mesa o recibir visitas.
El tiempo también debe respetarse: unas horas destinadas a las tareas hogareñas y otras para su trabajo personal. Ninguno debe sobrepasar al otro. Para ello, lo mejor es establecer un horario fijo y cumplirlo a rajatabla.