Cultivando las semillas de naranjas, limones y mandarinas y plantando paltas maduras obtendrá plantas muy llamativas para decorar sus ambientes y, de paso, aprovechar sus frutos.
Las plantas cítrica son muy fáciles de obtener. Todo lo que tiene que hacer es separar varias semillas de cítrico que prefiera, lavarlas muy bien y plantarlas antes de que se sequen. Si tiene la posibilidad de hacerlo el mismo día en el que fueron quitadas del fruto, mejor aún. Después, humedezca bien la tierra, lleve la maceta a un sitio templado y espere a que comiencen a crecer las primeras hojas. Recuerde regar moderadamente.
Si, en cambio, prefiere obtener la planta de palta, tome el carozo de esta fruta, atraviéselo con dos palillos de madera justa a la mitad y sosténgalo en un frasco lleno de agua, de manera tal que la mitad del carozo más redondeada quede sumergida. Controle periódicamente que no descienda el nivel del agua y, cuando hayan crecido las primeras hojas y las raíces, trasládelo a una maceta con tierra y turba. Llévelo a un sitio bien luminoso.