Si a su armario lo atacó la humedad, es un inconveniente, pero tiene solución. Llene una lata de café con carbones. Perfore orificios en la tapa y coloque la lata en el armario. También puede optar por atar 12 tizas comunes y colgarlas en el interior del armario. La tiza absorbe la humedad del aire.
Otro problema muy común es la aparición de polillas. Éstas crecen en el polvo y la suciedad, por lo tanto, lave y ventile las prendas antes de guardarlas. Limpie los armarios y cajones al menos una vez al año y no forre los cajones con papel adhesivo que atrae las polillas. Para combatirlas, esparza cáscaras secas entre la ropa y zapatos y además coloque clavos de olor enteros en los bolsillos de los sacos, antes de guardarlos y en bolsas de plásticos para los buzos de lana. Si las polillas llegaron a su ropa, lávela y cuélguela al sol durante dos horas. Luego colóquela en el secarropas.
Para mantener la ropa perfumada coloque un jabón sin envoltorio en el armario de la ropa blanca. Otra opción que además sirve para mantener lejos a las polillas, es hacer sus propios perfumeros de lavanda. Ate un ramito en un cuadrado de muselina y colóquelo en los cajones y cómodas.