Muchas investigaciones médicas determinaron que las mujeres que tienen problemas de hipertensión leve o moderado no manifiestan mejoras importante cuando realizan tratamientos con medicación específica. De acuerdo con las indicaciones de su médico con puede incluir otras alternativas en busca de solucionar más rápidamente este problema.
La nutrición tiene mucho que ver con la hipertensión. Es importante consumir vitamina E, ya que ayuda a equilibrar la dilatación y la constricción de arterías (responsables de la presión sanguínea).
Los alimentos que tienen estas vitaminas son: las almendras, las nueces, las avellanas, el germen de trigo, el aceite de maíz, la margarina y la harina integral.
El selenio actúa como antioxidante y ayuda a destapar las arterias tapadas. Lo encontramos en alimentos como: el pescado, el pollo, el hígado y los riñones, el germen de trigo, la leche, el salvado, el brócoli, el ajo y las cebollas.
Lo importante es tener en cuenta estos alimentos a la hora de seleccionar los platos diarios.