La bacha de la pileta de la cocina es sin duda uno de los elementos de la casa que más se usa todos los días. A veces, también puede requerir que nos ocupemos un poco de él para seguir utilizándolo sin inconveniente.
Si descubre que se ha despegado de la mesada y no quiere o no puede encargarle el arreglo a un plomero, anímese a poner manos a la obra y deje su cocina como nueva.
Para empezar quite la bacha de la pileta, limpie bien su superficie y la de la mesada para eliminar todo el pegamento viejo.
Luego utilice un pegamento bien resistente, puede ser membrana plástica, que adhiera metal con el material de su mesada. Extienda el pegamento sobre una y otra superficie a adherir, vuelve a calsar la bacha en su lugar y sosténgala con dos varillas de madera ubicadas como columnas al menos durante 6 horas. Se es posible, deje allí las maderas definitivamente para aliviar el peso al pegamento.
Además, para evitar que ocurra un nuevo accidente recuerde no dejar los platos muchas horas en las bachas para que el sobrepeso no las despegue nuevamente.