No se trata de una lección de ética ni buenas costumbres. Nada de eso, simplemente, de lo que el título mismo sugiere: saber ajustar un tornillo a un mueble u objeto de madera.
La solución para que un tornillo quede bien sujeto está en colocar dentro del agujero un palillo de madera y, después, volver a atornillarlo como de costumbre. Otra opción es darle varias capas de esmalte incoloro para uñas.
En el caso de que la madera esté demasiado dura y difícil de atornillar, le convendrá aplicar sobre el tornillo un poco de jabón seco o crema de afeitar.
Ahora, si lo que busca es el efecto contrario, o sea, aflojar un tornillo, le sugerimos verter sobre éste unas gotas de agua oxigenada, dejar actuar unos cinco minutos e intentar nuevamente.