En el caso de que haya marcas de óxido, lo más conveniente es hacerlo pulir y luego aplicar una capa de pintura. En cambio, si el metal es nuevo, revíselo cuidadosamente porque en algunas ocasiones, después del proceso de galvanización, quedan algunos restos de grasa que impedirán que se adhiera la capa base.
Para limpiar las piezas emplee vinagre, luego pinte con sellador y finalmente deje secar. Con respecto a los materiales para pintar, los más indicados para este tipo de superficies son los esmaltes sin brillo o las mate en aerosol, ya que los acrílicos tienden a levantarse.