Antes de comenzar a trabajar una madera virgen pase una lija para eliminar las imperfecciones y después un trapo para quitar el polvillo. Luego, combine sellador, que se consigue en pinturerías y ferreterías, con una base de pintura. Aplique dos capas de este mezcla lijando entre cada uno.
La pintura mezclada con el sellador ofrece la ventaja de que al trabajar con la pieza no se producirán marcas por la humedad o la grasitud de las manos.
Por otro lado, los blanqueadores para maderas pueden ser útiles para quitar marcas de agua o de tinta, mientras que la tierra de batán, disponible en casas especializadas, es útil para retirar manchas de aceite.