Si necesitas una excusa para no asistir al trabajo, a una reunión familiar, a un centro educativo, o a un evento que quieras evitar por alguna razón; una buena alternativa para conseguirlo es quedarse afónico.
Pero, ¿cómo quedar afónico sin tener que gritar?; esto es muy importante, porque en la búsqueda de métodos para perder la voz, de seguro encontrarás artículos que recomiendan gritar, ya sea a los cuatro vientos alarmando a todos los vecinos, o contra una almohada para ahogar el sonido.
Sea cual sea el método, siempre que involucre gritar es preferible evitarlo, ya que puede acarrear problemas de salud vocal, tales como los pólipos y los nódulos. Tu voz dice mucho sobre quién eres, complementa tu personalidad, y es una parte muy importante al momento de presentarte ante una nueva persona, en una entrevista de trabajo, y otras situaciones similares. Por eso debes cuidarla, y evitar gritar en vano cuando existen mejores alternativas para quedar afónico de un día para otro.
Una de esas alternativas se basa en la irritación de las cuerdas vocales. Para ello deberás hacer gárgaras con limón, dos de ellos exprimidos en un vaso es suficiente. Luego repetir el mismo proceso pero con vinagre. Intercala las gárgaras con ambas sustancias durante un periodo de 30 a 45 minutos, cuando tu voz empiece a sonar rasposa te darás cuenta que vas por buen camino. Métodos como toser reiteradamente también pueden provocar irritación de las cuerdas vocales.
La aplicación de hielo, usando una bolsa, en la zona del cuello y la garganta, provoca que las cuerdas vocales se contraigan a razón de la baja temperatura a las que son expuestas. También ayuda el hecho de comer hielos y consumir bebidas casi congeladas.
Finalmente, es muy importante que tengas en claro que no debes sacrificar tu salud para conseguir el resultado que se desea, si empiezas a sentir malestar por un periodo largo de tiempo luego de aplicar algún método, lo más recomendable es recurrir a un especialista.