Según aseguran los entendidos, los diferentes olores que llegan al cerebro mediante el olfato pueden traducirse en positivos efectos sobre todo nuestro ser, tanto a nivel físico como mental. Es por eso que los aromaterapeutas recomiendan a sus pacientes perfumar los ambientes con aceiten esenciales que generen las vibraciones que necesitan para equilibrar sus emociones. Estos son algunos de los más utilizados:
- Lavanda: combate el estrés, disminuye la ansiedad y el estado de tensión general.
- Sándalo: además de sedante es muy afrodisíaco.
- Incienso: aleja las malas ondas y alivia las preocupaciones.
- Jazmín: estimula el cerebro, eleva la autoestima y, además, es un buen antidepresivo.
- Eucalipto: mantiene despierto. Ideal para ambientes de trabajo o estudio.
- Viridis: Aumenta el poder de la energía vital.
- Azahar: levanta los estados de ánimo.
- Rosa mosqueta: tiende a lograr el equilibrio mental y físico.
- Violeta: Ahuyenta las ondas de la envidia y atrae la energía positiva.
- Mirra: libera el miedo y el temor.