Si lo pensamos un poquito, dividiendo esta palabra en varias partes, tal vez logremos descifrar de qué se trata esta nueva terapia. Por supuesto, comprenderemos mucho más si nos dejamos informar por los que verdaderamente saben y tratan a través de esta técnica.
Todo sabemos que muchas patologías físicas están íntimamente relacionadas con nuestro psique. Por eso, algunas veces un simple tratamiento corporal no basta para erradicar por completo el problema.
Estas patologías son, en general, las enfermedades articulares, el asma, el estrés, la fatiga crónica, el síndrome cervical, las cefaleas intensas, los problemas coronarios y de los pulmones y todas las afecciones del sistema inmunológico, entre otras. Claro que también se consideran problemas las dificultades en la demostración de los afectos.
La biopsicodanza busca, a través de la asociación de varias disciplinas, lograr que la persona pueda experimentar un encuentro verdadero consigo mismo; que autodialogue, que de autoevalúe, se autovisualice. Esta vivencia y las resonancias internas a las que conduce son el ABC de esta técnica.
La pregunta que surge de inmediato es ¿cómo se logra esto? Y la respuesta es muy simple: a través del juego, la danza, la expresión corporal y la creatividad.