¿Qué dieta me conviene?

Actualmente existen muchas dietas famosas disociadas. Son los regímenes de moda. Existen muchas clases diferentes de estas dietas y algunas se parecen bastante entre sí. Son dietas no restrictivas que no imponen cantidades ni prohíben alimentos, de allí que cada vez tengan más adeptos. La propuesta es tener un régimen totalmente opuesto a las dietética tradicional, que se basa en el valor calórico de los alimentos fundamentalmente.

Según los seguidores de estas dietas, se engorda por un metabolismo defectuoso de los hidratos de carbono. Además plantean que las comidas elaboradas mezclando los distintos grupos de alimentos resultan de difícil digestión y absorción. En cambio, una correcta mezcla colabora a que la digestión sea más fácil, ayuda a desintoxicar el organismo y a bajar de peso. Quienes las realizan aseguran que se reduce el apetito paulatinamente al acostumbrarse a comer sólo un tipo de alimentos por vez.

Es por ello que proponemos no mezclar proteínas con hidratos de carbono en una misma comida. Algunas dietas incluso proponen comer las frutas con el estómago vacío. En otras se las admite como postre siempre que se las elija de una forma en particular: de acuerdo con su grado de acidez. Por estas mismas razones es que para otras personas con hábitos alimentarios adquiridos durante toda la vida comenzar una dieta de estas características resulta muy difícil, pues no pueden acostumbrarse.

No se debe jamás pasar por alto que según la ciencia, los descensos de peso se logran más por un cambio en la actitud con respecto a la comida y al hecho de tener que pensar bien antes de sentarse a la mesa, sin atiborrarse con cualquier plato y no por las mezclas en sí.