La memoria es un proceso muy estructurado y complejo. Algunas personas tienen la suerte de nunca olvidarse de nada, hasta parece que su mente funcionase como una computadora. En cambio, otras se olvidan hasta las cosas más elementales y viven gracias a los ayuda memoria que significan los papelitos pegados por todos lados.
Por lo general, ser distraído se debe a una reacción en cadena que ellos mismos provocan, porque, una vez que se olvidan de algo, se califican de distraídos y luego tienen dificultades para recordar. Se convencen de eso y ese pensamiento ocupa su mente.
Si usted pertenece a este grupo, es muy importante que cuando tenga que recordar algo le mande a su cerebro el mensaje de que lo va a lograr fácilmente. En el mundo apresurado de hoy a veces estamos tan sobrecargados de tareas que nos acostumbramos a postergarlas lo máximo posible. Así va creciendo la lista de cosas que tenemos que hacer y no actuar cuando es necesario provoca que el cerebro reciba un falso mensaje de alarma. Después de varios años, el cerebro aprende a considerar muchas tareas como falsas alarmas.
En estos casos hay que reentrenar la mente de inmediato. Tome nota de pensamientos y acciones que se le ocurren durante el día. Lea la lista constantemente y enséñele al cerebro que de ahora en adelante hará un seguimiento de todos los mensajes que le envíe. Además, haga de la relajación un hábito. Su mente probablemente necesite una limpieza para aquitarla.